En este espacio hemos venido señalando, de manera
insistente, cuáles son los impactos negativos que está
teniendo sobre nuestra salud y calidad de vida fenómenos
como la contaminación ambiental, el calentamiento global, la
pérdida de la diversidad biológica y, en particular, las
actividades humanas que están llevando a la destrucción de
la vida en el planeta.
Sin embargo, siempre procuramos que nuestra audiencia no
perciba una sensación de derrota y que sepa que –aunque ya
con un enorme grado de urgencia-, todavía hay posibilidades
para frenar y revertir la tendencia actual del colapso
ambiental.
Y es en el tema de la generación de energía donde,
señaladamente, descansan muchas de las soluciones a la
actual crisis ambiental; una transformación integral y un
tránsito de este sector hacia tecnologías limpias, amables
con el medio ambiente, contribuirá –como ya se ve lo hace
efectivamente- a reducir y a suprimir muchas de las amenazas
que hoy vivimos.
En el plano económico, por ejemplo, el costo de la energía
solar está disminuyendo tan rápidamente que ahora es más
barata que el carbón (según lo señala un reciente informe de
la consultora estadounidense Lazard, publicado por el Foro
Económico Mundial); desde el 2009, producir energía solar ha
experimentado una disminución del 86% en su costo.

El costo de producir un megavatio-hora de electricidad es
ahora de 50 dólares para la energía solar; el costo de un
megavatio-hora de electricidad a partir del carbón es de 102
dólares.
Los analistas internacionales prevén la posibilidad de que,
a partir de esta caída en los precios de producción, se
detone un cambio hacia las fuentes de energía renovables
–como la eólica y la solar-, reduciendo sustancialmente la
participación del petróleo y el gas natural.
Sin lugar a dudas, esta transición energética será la
contribución más poderosa para lograr una desaceleración del
proceso de cambio climático en el que estamos inmersos.
Y es alentador constatar que, de acuerdo con el Programa de
las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, en el 2017 fue
instalada más capacidad de energía solar que cualquier otro
tipo de energía en el planeta.
En la actualidad, alrededor del 12% de las necesidades
energéticas del mundo están siendo cubiertas por fuentes de
energía renovable (como la solar, la eólica y la
hidráulica); y, tan sólo en el 2017, el sector solar atrajo
una inversión cercana a los 161 mil millones de dólares, lo
que supuso un aumento del orden del 18% con respecto al año
anterior.
Dados los problemas tecnológicos que aún presenta la energía
solar, concretamente en lo referente al almacenamiento, su
participación en la generación de energía será todavía por
algún tiempo limitada.
Según informa la Asociación Mexicana de Energía Solar (ASOLMEX),
nuestro país cuenta hoy con 37 centrales solares en
construcción con una inversión estimada de 5 mil millones de
dólares y, gracias a nuestra privilegiada ubicación
geográfica dentro del llamado “cinturón solar”, el 85% de
nuestro territorio cuenta con óptimas condiciones para la
generación de energía solar.

Hoy, alrededor del 20% de la energía eléctrica en México
proviene de fuentes renovables y, de acuerdo con ASOLMEX, se
espera que para el 2019 un 13% de ésta sea generada con
energía solar y, para el 2024 –como nos hemos comprometido
ante la comunidad internacional- alcancemos hasta un 35% de
la generación de electricidad a través de las energías
limpias. Se estima que, tan sólo las inversiones en la industria de
energía solar significará una aportación de más de mil
millones de dólares y la creación de 13 mil empleos en el
país (hoy ya están invirtiendo en el sector empresas
italianas y españolas)
Así que, por nuestro bien, es importante que los mexicanos
decidamos informada e inteligentemente el rumbo que queremos
para nuestro sector energético y para nuestro desarrollo
sustentable; ¿nos conviene seguir priorizando inversiones
hacia la explotación de hidrocarburos o, como lo estamos
viendo en las tendencias mundiales, no será el momento ya de
comenzar a aprovechar las poderosas oportunidades que aquí
hemos señalado? Lo dejo a su criterio. ▄